Como uno de los APR más grandes de la región fue calificado en su inicio el proyecto de ampliación y mejoramiento del sistema que abastece a las localidades de Curriñe y Chabranco, en la comuna de Futrono, una millonaria inversión que hoy los habitantes de esta zona cordillerana miran con desconfianza ante la evidente escases de agua para alimentar la captación.
El proyecto, ejecutado por la Dirección de Obras Hidráulicas (DOH), contempla la ampliación del actual APR, a fin de conectar por primera vez a 172 familias y reconectar otras 120 gracias a la habilitación de una extensa red de distribución de más de 23 kilómetros, todo con una inversión de 1.372 millones de pesos.
Sin embargo, y cuando se anuncia una pronta marcha blanca, vecinos de Chabranco expresan su descontento con el proyecto, señalando que la ubicación de la captación de agua no es la idónea para este fin, y temen que la inversión termine siendo un despilfarro ante la sequía que desde hace unos años afecta a la zona en época de verano.
"NO LE TOMARON EL PARECER A LA GENTE"
Oscar Leal, comenta que es nacido y criado en Chabranco, y ha asumido el rol de vocero de la comunidad frente al problema del agua, “conozco el clima acá, y de un principio empezó mal esto porque la captación del agua no era para ese sector”, explica.
Leal señala que en reunión con autoridades al momento de anunciar el proyecto, se les indicó que el lugar contemplado para ubicar la captación debía ser cambiado, “empezaron mal porque no le tomaron el parecer a la gente de acá, les consultaron a algunas personas de Curriñe, pero esas personas no conocen acá donde vivimos nosotros”, reclama, “la culpa es de las personas que hicieron el estudio, y no quiero ser pesimista pero a lo mejor esto va a dar solo para 2 años, porque el agua está disminuyendo demasiado”, comenta preocupado. Pero el proyecto ya venía hecho, así que la alternativa ofrecida no dejó lugar a mayor diálogo; Si no quieren el proyecto, lo llevamos a otro lugar, habría sido la respuesta desde la DOH.
El calentamiento climático y la explotación forestal en la zona han hecho lo suyo, disminuyendo la disponibilidad de agua en esteros y vertientes, y se suma un tercer elemento; la integración de nuevas familias a la red de agua potable rural, lo que va en aumento.
OBRA COMPLEMENTARIA
Actualmente la situación de las familias de Chabranco es crítica, deben llevar agua en bidones desde otros sectores, o dependen de la visita regular de un camión aljibe, “y aquí hay muchos adultos mayores, y hasta hoy no les llega agua a la casa, es preocupante la situación, y si no tienen quien les ayude ¿Dónde van a conseguir agua?”
Por ahora, con apoyo de la municipalidad de Futrono debieron idear una obra complementaria; un estanque de 10 mil litros que será alimentado por camiones aljibe para sortear los días en que la bocatoma estará cerrada para acopiar agua, “pero si no llueve en este mes, la captación se seca total”, sentencia. Y al respecto Oscar Leal indica que “si llega a llover, debiera ser por 3 días intensos para recuperar el caudal de la captación de agua”.
Lo concreto es que prontamente la obra será finalizada y entregada, y es de esperar que cumpla con su objetivo, en caso contrario de seguro en el futuro se deberá levantar un nuevo proyecto para dar solución a una situación que no se previó en su momento.
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