Alejandro Brevis: "Agradezco el esfuerzo de quienes colaboraron en buscar a mi esposa"

Marido de María Valdebenito reconoció emocionado el vestuario y zapatos: "son los de ella"

Durante meses la familia Brevis se mantuvo en la incertidumbre de saber qué había sucedido con María Valdebenito, la matriarca del clan de 2 hijos y 6 nietos,que desapareció sin dejar pistas de su paradero el pasado 21 de agosto, desde su hogar de Loncopán Bajo.

Padecía de transtornos cognitivos - una fase temprana de alzheimer - y no era la primera vez que se perdía de su casa, por lo que su marido, el profesor Alejandro Brevis, e hijos mantenían la esperanza de que estuviese en otra ciudad. Hipótesis que se acrecentaba con los llamados telefónicos provenientes de Los Lagos e incluso Temuco, señalando haber visto una mujer con las características de la dueña de casa de 63 años.

Desapareció el 21 de agosto, pasadas las 14.00 horas, siendo el técnico de una empresa de cable el último en verla con vida, esto luego de realizar trabajos en el domicilio ubicado en el sector rural de Loncopán Bajo, en la comuna de Futrono.

Inmediatamente se inició una incansable búsqueda por parte de Carabineros, Bomberos y también la Policía de Investigaciones, quienes incluso con perros adiestrados, recorrieron canales y bosques aledaños sin éxito. Afiches con su rostro circularon por medios de comunicación, comercio, terminales de buses y lugares concurridos sin que nadie pudiera entregar información cierta de su paradero.

En su desesperación acudieron a las autoridades, siendo escuchados por la alcaldesa Sarita Jaramillo, quien en colaboración con el intendente Egon Montecinos, dispusieron recursos para su búsqueda, pero también sin resultados.

Esa incertidumbre y sensación de que podía estar en cualquier parte culminó este miércoles, luego de casi 6 meses de rastreo. Al mediodía fue hallada por un cazador de jabalíes en un bosque de eucaliptus distante a un kilómetro de su casa, en un lugar de muy difícil acceso.

¿CÓMO LLEGÓ HASTA ALLÍ?

Diario Futrono llegó al lugar a los pocos minutos del hallazgo y acompañó al profesor Alejandro Brevis en la espera de Carabineros y la PDI, junto a un vecino y su familia.

La zona de bosque de eucaliptus formados en hileras perfectas separadas por 3 metros fue el fin del camino de María Petronila. Un trayecto repleto de raíces y zarzamora, difíciles de caminar de día, ni imaginar de noche. 

"¿Cómo pudo llegar hasta aquí, si se agitaba con facilidad. No entiendo", se pregunta Alejandro, quien no cree en la intervención de terceros, pero espera conocer en el menor tiempo posible el resultado de la investigación. 

El punto donde aparecieron los restos está ubicado a unos 950 metros de casa. La búsqueda de Bomberos incluyó un radio de varios kilómetros, pero no consideró la profundidad de este bosque que limita con el camino a Loncopán Alto y muy cerca de la ruta que conecta a Futrono con Los Lagos. 

El cadáver en descomposición tenía la ropa que vestía María el día que se perdió su huella: sombrero, pantalón negro, polar, chaqueta de cuero, zapatillas. "Es su ropa", aseguró el marido, quien llevaba puesto el mismo modelo de sombrero y zapatillas que un día compraron juntos en Valdivia. 

El cazador de jabalíes, residente en la zona y conocido de la familia, recorría el lugar cuando sus perros se inquietaron y dieron con el cuerpo. "Iba junto a los perros cuando me acerqué al lugar y allí estaba el cuerpo", explicó a Diario Futrono el autor del hallazgo que dice estar satisfecho por haber colaborado.  

DESPEDIDA Y AGRADECIMIENTO

Abatido pero firme, Alejandro Brevis no sólo debió soportar por meses el dolor de la pérdida, sino también se sobrepuso a la lógica de la investigación donde él era parte de las hipótesis que debían ser descartadas. El respaldo de su familia, sus colegas profesores,y el apoyo sicológico le permitieron salir adelante para enfrentar hoy con entereza el fin del camino y despedir a la mujer que lo acompañó en un matrimonio de 43 años.  

Alejandro pidió a Diario Futrono agradecer a la alcaldesa Sarita Jaramillo, concejales, intendente, gobernador, Bomberos, Carabineros, PDI, Colegio de Profesores, vecinos, amigos y a todos quienes colaboraron en la búsqueda y le brindaron palabras de aliento en estos meses de angustia. "En nombre de mi familia, muchas gracias a todos", dijo.