Una emotiva y multitudinaria despedida dieron los habitantes de la comuna de Lago Ranco a Roberto Martínez, pastor evangélico, quien perdió la vida en el trágico accidente de Puerto Lapi.
El cortejo fúnebre tuvo una parada en el Liceo Antonio Varas, en donde los miembros de la Misión de la Iglesia en Chile realizaron un responso evangélico, encabezado por el obispo Francisco Fuentealba.
Se estima que más de dos mil personas acompañaron el cortejo fúnebre y cientos de Ranquinos salieron de sus casas para darle el último adiós al pastor Martínez, persona muy querida y respetada en la comuna.
Hasta el cementerio municipal también concurrió el alcalde Santiago Rosas, concejales, el diputado Gonzalo Fuenzalida, el gobernador del Ranco Sergio Gallardo, y pastores evangélicos de toda la región.
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